Escribir

¿Por qué escribo?

La respuesta a bote pronto es porque no puedo evitarlo. Pero si analizo un poco más en profundidad las fuerzas que me mueven descubro que en realidad escribo para no sentirme solo.

La soledad, entendida en su sentido negativo de aislamiento no deseado, no proviene de estar rodeado de más o menos gente; sino de tener la sensación de que lo que a uno le importa no le importa a nadie más.

La necesidad de escribir es por tanto equivalente a la necesidad humana de comunicarse y sentir la conexión con los otros.

Por eso, cuando alguien comenta o me felicita por algún artículo, no es mi ego el que se alegra. La alegría proviene directamente de sentir que uno, durante unos instantes, no está solo en este frío e indiferente Universo.

Leave a Reply

Your email address will not be published.*